Excelente punto. Tradicionalmente se pensaba así, pero la experiencia nos ha enseñado que es mucho más costo-efectivo y seguro actuar antes. Durante la construcción se crean puntos de entrada y anidación ideales para plagas como termitas, roedores u hormigas carpinteras, que quedan ocultos tras muros y estructuras. Nuestro programa "Construcción Protegida" interviene en esas fases críticas para crear barreras preventivas y tratar zonas vulnerables antes de que queden inaccesibles. Corregir una infestación establecida en una estructura terminada es infinitamente más caro, disruptivo y dañino para la reputación que prevenirla desde el inicio. Protegemos su inversión y la calidad final de su proyecto.

Comprendemos perfectamente la importancia crítica de los plazos en la construcción. Por eso, nuestro programa está diseñado para integrarse fluidamente en su cronograma, no para interrumpirlo. Trabajamos en estrecha colaboración con el jefe de obra o el equipo de proyecto. Identificamos las ventanas de oportunidad clave (ej. antes de cerrar muros, antes de verter ciertas losas, tratamiento de suelos previos a la construcción, etc.) y planificamos nuestras intervenciones para que coincidan con esas fases, minimizando cualquier impacto en el avance general. La clave es la coordinación proactiva, y en eso somos especialistas.

El MIP aplicado a la construcción se enfoca en la prevención a largo plazo. No se trata solo de aplicar químicos. Incluye: Inspección y Asesoramiento: Evaluamos el sitio, el diseño y los materiales para identificar riesgos específicos. Barreras Físicas y Químicas: Aplicamos tratamientos específicos y de larga duración en puntos críticos (cimientos, zócalos, pasantes de instalaciones) para prevenir el ingreso y anidación de plagas clave como termitas subterráneas o roedores. Modificaciones Estructurales Menores (recomendaciones): Sugerimos pequeñas adaptaciones en el diseño o ejecución para eliminar posibles puntos de entrada o refugio. Tratamientos Específicos: Utilizamos productos profesionales de baja toxicidad residual y alta persistencia, aplicados de forma segura y localizada por técnicos certificados. Son totalmente seguros para la integridad de los materiales de construcción y, una vez curados/secos, no representan riesgo para los trabajadores ni los futuros ocupantes. Siempre cumplimos con las normativas vigentes

Nuestro programa "Construcción Protegida" se enfoca estratégicamente en las plagas estructurales y de mayor impacto económico que suelen establecerse durante la obra y causar daños a largo plazo. Principalmente: Termitas subterráneas: La principal amenaza para las estructuras de madera o con componentes celulósicos. Roedores (ratas y ratones): Que buscan refugio y pueden dañar cableado e instalaciones. Hormigas carpinteras y otros insectos xilófagos (según la zona y materiales): Que pueden debilitar elementos estructurales. Otras plagas oportunistas: Según el entorno de la obra (cucarachas, etc.), podemos incorporar medidas preventivas. El objetivo es crear una defensa robusta contra las amenazas más significativas que comprometen la estructura y habitabilidad. Si bien ningún sistema puede garantizar un 100% absoluto contra toda la naturaleza, este programa reduce drásticamente la probabilidad de infestaciones graves.

El costo del programa "Construcción Protegida" es variable y se calcula en base al tamaño del proyecto, las fases de intervención requeridas y los riesgos específicos identificados. Sin embargo, siempre debe verse como una inversión, no como un gasto. Piénselo así: el costo de nuestro programa preventivo es una fracción mínima de lo que costaría solucionar una infestación de termitas establecida (que puede incluir reparaciones estructurales, tratamientos complejos y daños a la reputación) o los problemas derivados de roedores dañando instalaciones críticas. Ofrecemos un presupuesto detallado tras una evaluación inicial del proyecto. La tranquilidad de entregar una obra protegida y el ahorro potencial a futuro justifican ampliamente la inversión inicial en prevención.